viernes, 31 de julio de 2015

LEVÁNTATE, COME, TODAVÍA TE QUEDA MUCHO POR CAMINAR…

Las, y los Catequistas nos invitan a un “retiro espiritual”, a detenernos un poco, para mirar el camino recorrido y alimentarnos para lo que queda de camino.
El ángel, nos invita por medio de un amigo diciéndonos:“levántate, come, todavía te queda mucho por caminar…”
Para levantarnos necesitamos comprensión, MISERICORDIA. Y para alimentarnos necesitamos ALIMENTO y posibilidad de recibirlo.
 Por eso junto al ángel, al Espíritu que nos convoca y acompaña, por medio de amigos y desde dentro, también estará muy presente Francisco, el papa, con sus gestos y palabras desde la fuente Jesús.
Estamos invitad@s los que nos está yendo bastante bien, en la siembra y la cosecha, y los que andamos en búsqueda, un poco errante, entre animales domésticos y salvajes… A TOD@S NOS CONVOCA EL PADRE BUENO.
Se necesita venir dispuestos a caminar, por nuestras praderas interiores, por nuestras zonas rocosas y pajonales… zonas ya conocidas y dispuestos a ir a  donde todavía no hemos llegado.
En todo encuentro con la persona de Jesús, es costumbre el encuentro  personal y comunitario, en este caso lo comunitario será “hacer el retiro juntos”, poniendo el acento mas en lo PERSONAL, ya que: NECESITAMOS TIEMPO PARA RECORRER NUESTRA TIERRA INTERIOR QUE SE NOS HA DADO , CON TODAS SUS FORMAS. Por lo tanto la soledad y el silencio serán primordiales.
Te esperamos el domingo 9 de Agosto desde las 14.30 hasta las 18 hs. 
En el Colegio Maria Auxiliadora de Melo, en casa de retiro, entrada por Wilson Ferreira. 

jueves, 30 de julio de 2015

EL MILAGRO del cumpleaños de “ LILITO “, el alambrador.

Cuando acontece algo realmente lindo, generalmente decimos:- “cómo me gustaría que fulano o mengano estuviesen aquí ”... Y con el tiempo si nos reencontramos con ellos les contamos lo vivido y que los tuvimos muy presente en ese momento. Por supuesto que nos imaginamos que esa persona disfrutaría profundamente de esa actividad que se ha realizado.

Algo así nos ocurrió el fin de semana pasado en Sarandí de Barcelo, en el cumpleaños de Lilito, el alambrador. Estando ahí y siendo parte de ese milagro de una gran fiesta, recordábamos personas muy queridas, que nos hubiese gustado que estuviesen ahí. Sabiendo que lo disfrutarían mucho.
Entre tantas personas recordadas en particular dos estaban muy presentes en esa fiesta en nuestro corazón y estoy seguro que también en el sentir de muchos de los presentes. Uno de ellos  es el amigo llamado Francisco, el papa, que tanto disfruta del encuentro con los más sencillos, reflejando en palabras y gestos al amigo mayor, al mismísimo Dios.
Desde muy temprano, después de muchos días de preparativos y  con los primeros rayos de sol, estaban los siete corderos en la parrilla. Los leñeros y asadores se acompañaron de algunos que cebaban mate y compartían un trago y la charla. El comentario que no podía faltar era:- “¡qué día!”, ya que en pleno julio en la mitad del invierno “alguien” nos estaba  regalando  un día maravilloso de sol. Quizás el mismo sol, tuvo que organizar un poco el tiempo, para estar presente desde el amanecer hasta el atardecer de la fiesta.
Y fueron llegando: los pequeños propietarios, otros un poco más grandes y otros con sus manos de trabajo pero sin tierra ni ganado. Mujeres y varones con sus hijos, algún abuelo y un buen grupo de jóvenes. También algunos ciudadanos de Río Branco y Melo, sin faltar algún brasilero y algún europeo. Las botas y bombachas, hacían rueda con las alpargatas, sandalias, tenis, polleras pantalón vaquero. Lo distinto de esta fiesta es que no hubo tarjeta de invitación, ni portero.
Al mediodía: los saladitos se acercaban en bandejas  vaya a saber uno quien los hizo, quien los trajo. Había rueda de mate dulce y amargo en el galpón, bajo los árboles. Los más chicos jugaban en el patio con los marlos de maíz, otros hacían futbol, conga o taba. Los temas erande la aparición de las primeras golondrinas, el nacimiento de los corderitos, el brote de los árboles frutales. Todo eso charlado con las noticias de la salud de algún vecino, la suba del dólar, el triunfo de Uruguay en fútbol sobre Brasil por los panamericanos. Y bueno, también hay que decir que hubieron algunos comentarios de amores y desamores que no podían faltar…
Alguien dijo que hasta cien personas había contado, haa un buen rato, y la gente seguía llegando. Cuando las brasas de coronilla realizaron su trabajo comenzó el reparto del asado, acompañado de ensalada y un sabroso chorizo. Un momento después, se podía escuchar el trinar de los pájaros, porque la multitud estaba en silencio masticando. Fue un momento lindo para observar las miradas y ver tantas personas diferentes, realmente con una sonrisa en su rostro.
De sobre mesa la guitarra y el acordeón, más alguno un poquito pasadito que hacía de la mesa un tambor. Los que ofrecieron la casa, en el pesebre del galpón, fueron de los primeros que movieron el esqueleto con aplausos en rueda del resto de los fieles. El cumpleañero fue invitado, bailando con todo tipo de pareja, algunas que despertaban una sana risa porque se pisaban los callos o las alturas no coincidían. Esto es una verdadera fiesta, donde no es necesaria gran inversión, sino donde nos arreglamos con lo que hay.
A media tarde, llegó el momento del corte de la torta, donde apareció por ahí, muy cerquita del cumpleañero, la foto de ese tal Francisco que seguramente estaría muy contento de que lo hayan hecho presente. Y hay que dejar bien claro, que su presencia no molestó ni se impuso a los muchos hermanos evangélicos, ni a alguno que dice no creer en Dios. Como dijo un paisano:- “a nadie le viene mal una bendición y menos a nosotros que andamos dia lindo con bichos con bichera, montados a caballo cruzando bañados con cruceras”. Entonces el mismo cumpleañero quiso que el curita amigo, invocara esa bendición  para él y para  todos los presentes que la quisieran recibir.
Bendición que comenzó con el canto de deseo de un cumpleaño feliz, que mes que un deseo fue un agradecimiento por la felicidad que estaba aconteciendo. Si bien todos eran amigos e incluso estaban las hijas y los nietos, al cura se le inspiró invita a dos amigos del cumpleañero para el momento de la bendición. Y la celebración fue de pocas palabras, con un gesto que dejaba claro las raíces del milagro de esta fiesta: un Lilito que no vive para sí, sino que vive  para servir y para compartir. Entonces uno de los más ancianos con su poncho de lana, que muchas veces animó fiestas con su guitarra, y uno de los compañeros de trabajo del alambrador, el que hace los postes de piedras, fueron los elegidos para ser parte de la bendición.
Porque Dios se pone contento cuando lo que recibimos lo compartimos con aquellos que tienen menos. Fue un momento realmente emocionante ver a los tres amigos disfrutando y haciendo disfrutar de su aliento apagando las velitas. Una vez más este hombre con corazón grandecompartió lo recibido, la fiesta, la torta, el canto con todos, pero en particular con aquellos que quizás nunca tuvieron una gran fiesta como esta… Gracias Lilito, gracias a los que aportaron para la realización de la fiesta, gracias por cada una de las presenciasgracias  por un año más de vida en la tibieza del campo y en un clima de amistad, bendecidos por el mismo sol.
Nacho 

miércoles, 29 de julio de 2015

JESÚS NOS INVITA A HACERCARNOS A ÉL

El sabio Eclesiastés dice que “hay un tiempo para cada cosa”; un tiempo para el trabajo y otro para el descanso, un tiempo para el encuentro y otro para estar a solas, un tiempo para la siembra y otro para la cosecha…
En la vida cotidiana, nos cuesta un montón convivir con una persona desequilibrada y cuando nos toca estar desequilibrados, sufrimos, molestamos y recibimos rechazo.
Una de la causas de los desequilibrios viene del colonialismo capitalista, económico y cultural; que se nos impone y nos esclaviza, absolutizando algo, en cada tiempo. Lo que nos aleja el buen vivir, es el tejido a tiempo de lo diferente, en forma armónica.
Desde los comienzos, la naciente Iglesia no era ajena a los desequilibrios de los mundanos. Los primeros discípulos estaban centrados únicamente en lo material y no cultivaban lo espiritual.
Jesús les dijo: «En verdad les digo: Ustedes me buscan, no porque han visto a través de los signos, sino porque han comido pan hasta saciarse. Trabajen, no por el alimento de un día, sino por el alimento que permanece y da vida eterna. Este se lo dará el Hijo del hombre; él ha sido marcado con el sello del Padre.»
Entonces le preguntaron: « ¿Qué tenemos que hacer para trabajar en las obras de Dios?» Jesús respondió: «La obra de Dios es ésta: creer en aquel que Dios ha enviado.»… El pan que Dios da es Aquel que baja del cielo y que da vida al mundo.» 
Ellos dijeron: «Señor, danos siempre de ese pan.» Jesús les dijo: «Yo soy el pan de vida. El que viene a mí nunca tendrá hambre y el que cree en mí nunca tendrá sed. (Juan 6, 24-35)
Si bien es muy cristiano el trabajar, sembrar, cosechar y consumir; trabajar y ganar un salario justo y digno… también es muy cristiano saber descansar bien y tener una buena relación con el Creador.
Esa relación con Dios, es una amistad que necesita ser abonada, regada, cuidada… necesitada de TIEMPO. La fe puede quedarse en el bautismo, en una ley, en un rito… o puede desarrollarse y extenderse hasta el punto de influir en TODO lo que acontece.
Hacerse tiempo para la ORACIÓN comunitaria y personal, nos hace crecer en la Fe. Y la amistad con Jesús nos permite experimentar la infinita misericordia de Dios y el anticipo de lo que acontecerá después de la muerte.

Una persona de Fe, quizás no sea el más bueno, pero realmente es persona de misericordia y no vive pensando que la muerte es el final. Por lo tanto esa comunión con Dios Padre de todos, lo hace ver en el otro a un hermano; quedando las cosas materiales al servicio del buen vivir, como medio y no como fin; y la Creación como la casa donada, que debe ser cuidada . Cuidado, porque hoy en día el descanso, lo espiritual, el relacionamiento y el encuentro con la naturaleza, es un negocio muy lucrativo para algunos.
¿Cómo es mi vida de trabajo?
 ¿Cómo estoy descansando? 
¿Qué tiempo le dedico a la oración comunitaria y personal?
 Las respuestas coincidirán con un sentirnos más o menos humanos. Jesús nos sigue invitando a acercarnos a El…
Nacho

domingo, 26 de julio de 2015

La manera de actuar de Dios en el mundo, es desde los más pequeños,

LA RELIGIOSIDAD EN TIEMPOS DE JESÚS, estaba centrada en la peregrinación al templo de Jerusalén, santuario para encontrarse con Dios y el cumplimiento de la ley. De todas partes por lo menos una vez en el año todas las personas religiosas, en búsqueda y curiosos se organizaban en caravanas para ir a ese lugar. Jerusalén era una ciudad con un gran poder económico y por supuesto que los circos, prostíbulos, posadas y negocios, se veían fortalecidos por este lugar de Dios cercano a ellos.

Jesús nacido en Belén, la población más pequeña de la región. Creció y maduró en Galilea donde nada bueno podía salir de ahí… Eligió ser trabajador manual. Vivió la religiosidad de su familia, de su Pueblo. Peregrinó como los demás hasta el santuario de Jerusalén.

Hoy en día mucha gente sigue ofreciendo o consumiendo distintos lugares materiales donde se puede ir para encontrarse con algo casi mágico, lugar de milagros, sanación, prosperidad… Dentro de distintas espiritualidades e incluso dentro de nuestra misma Iglesia Católica.

EL TEXTO BÍBLICO DE HOY nos presenta a Jesús con sus discípulos y discípulas atravesando el mar de Galilea. Recordemos que el mar, hacía también referencia al mal, por lo tanto nos presenta a la pequeña primera Iglesia andando por ahí… y lo seguía una gran multitud. Jesús subió a una montaña y se sentó allí con sus discípulos. Tuvo que hacer un esfuerzo físico, y la comunidad también, para sentarse en ese lugar menos fértil y rocoso. Se acercaba la Pascua, celebración central de la religiosidad Judía. Donde la ley decía que había que peregrinar hasta el Templo Santo. Mientras Jesús en Galilea había armado campamento a la intemperie.

Jesús le dijo a uno de sus discípulos ¿Dónde compraremos pan para darles de comer? El decía esto para ponerlos a prueba, porque sabía lo que iba a hacer. Y el discípulo le respondió que ni con mucho dinero se podría darles de comer. Otro dijo que había un pequeño que tenía cinco panes y dos pescados, pero ¿qué es esto para tanta gente? 

Jesús les dijo “háganlos sentar”. Entonces los que estaban en carros o caballos y los que estaban parados, todos tuvieron que sentarse en el suelo, al igual que los enfermos, los ancianos que ya lo estaban. Quedando todos al mismo nivel. Eran unos cinco mil varones, acompañados de las mujeres y los niños. Jesús tomo los panes y los pescados los bendijo y los distribuyó a los que estaban sentados. Dándole a todos los que quisieron. Y se dio el milagro cuando alguien comparte lo poco que tiene, toca el corazón de todos y cada uno sacó lo que llevaba en el bolso para él y su familia, lo puso en común, comieron todos hasta saciarse y sobró. Nada se desechó.

 Al ver el signo que Jesús había acabado de hacer la gente decía “este es verdaderamente el profeta que debía venir al mundo”. Jesús sabiendo que querían apoderarse de él para hacerlo rey, se retiró otra vez a solas a la montaña. (Juan 6, 1-15)

LA RELIGIOSIDAD CRISTIANA es seguimiento, es encuentro con la persona de Jesús. Quien no se manifiesta de manera mágica, ni les pide a sus discípulas y discípulos más cercanos que sean magos. La manera de actuar de Dios en el mundo, es desde los más pequeños, la clase media, que apenas tiene el pan y los peces suficientes para ellos. Esto puesto en manos de Dios, bendecido por Él y creando una organización inclusiva, en pequeñas comunidades, mueve los corazones y despierta la solidaridad, produciéndose el gran milagro: que todos se alimenten del pan y los abrazos que necesitan. Unos están llamados a compartir el pan, otros sus pescados y otros su servicio: la música, la presencia... Jesús nos deja también el testimonio y la propuesta que después de lo comunitario hay que saber retirarse a solas, para no creerse el rey, ni dejarse proclamar.

En la soledad se puede saborear, masticar lo vivido, poniéndolo en manos de Dios padre y madre, interiorizándolo para que se haga carne en nosotros. Ese pan y esos abrazos compartidos en ese momento de familia grande, donde es muy palpable la presencia de su Espíritu, será el alimento que nos mantendrá en el seguimiento cuando sus huellas no sean tan visibles, cuando el pan no sea compartido, cuando se siente el frió de estar a la intemperie sin abrazos… en medio del mundo como levadura, atentos y dispuestos a compartir nuestros panes y peces recibidos cuando Dios quiera hacer otro signo, que anticipa lo que será la vida eterna.
Nacho

Tenemos tanto para estar agradecidos….!


Hace un año tuve mi primer encuentro de fin de semana con la comunidad misionera Colibrí. El lagunazo de invierno del 2014….En ese entonces ni soñaba con viajar a Bolivia, pero cada encuentro sucesivo iba haciendo prender una llama especial, primero de curiosidad por aprender y luego de deseo de experimentar esa cercanía con el pueblo en búsqueda de la tierra sin mal.



Al año de ese primer encuentro fuerte, terminé aterrizando en Bolivia casi sin querer y antes de lo siquiera imaginado. La experiencia de compartir con Flor en el Tekove en Gutierrez, la experiencia de compartir con el Padre Heber y las Misioneras Franciscanas del Verbo Encarnado en Villa Montes, la de compartir en Santa Cruz con Mirtha y su familia, Maribel y su familia y tantos otros y otras…..la escapada a las dunas de arena y a Samaipata….lugares especiales vividos en compañía de otras especiales personas. Y en todos lados era la alegría, el compartir entre hermanos, los cuentos y las historias vividas de uno y de otro lado, la política, los problemas sociales y las alegrías de los avances en el proceso de recuperación de identidad indígena y de las culturas de los pueblos originarios. Y en medio de todo eso el cuestionamiento de por qué y para qué el viaje…


Y la respuesta es tan simple, que mas que una respuesta es un reafirmar lo ya sabido: estar en búsqueda, es estar buscándose a sí mismo y a Dios, es buscar los rastros que Dios va dibujando en nosotros a través de estas experiencias, y en los otros a través de nuestra interacción con ellos. No se puede dar lo que no se tiene, pero hemos recibido tanto en este viaje que tenemos mucho para dar de lo que es realmente importante: la vida que se entrega en cada compartida, abrazo, palabra, cercanía, mensaje…


y mucho de lo aprendido que resumo en esta anécdota: en casa de Mirtha nos alojábamos en un cuarto con Erik, donde él tenía una cama de dos plazas y yo una de plaza y media….o sea, cómodos a más no poder. El dia de la visita del Papa, en la noche organizaron una reunión en su casa para Celebrar la Palabra todos juntos con varios amigos y compañeros del camino. Nos pusimos a preparar el comedor con las sillas y demás para el evento, y como había ropa doblada en una silla, ingresé al cuarto que utilizaba Mirtha, su hermana y su sobrina a dejarla….llevándome la sorpresa de que las dueñas de casa estaban durmiendo en colchones en el piso mientras nosotros disfrutábamos de toda su hospitalidad hasta ese extremo….mucho para aprender del corazón abierto y del sentido de agasajo al huésped, a quienes, nunca antes habían conocido. Hubiera sido lo mismo en nuestra cultura uruguaya, entregar nuestras camas para dormir nosotros en el suelo…?

Gonzalo Rodríguez

viernes, 24 de julio de 2015

"Formando una sola Familia" .LAGUNAZO DE INVIERNO 2015

Como estaba previsto, en pleno Julio, 
 se realizó el encuentro Familiar de fin de semana en el Lago Merín.
PREVIA: Las laguneras y los laguneros: Rosario, Hebert, Juan Antonio, Carmen, Daniel, Gustavo, Alejandro... se encargaron de preparar el nido del altar y de la mesa. Cortaron el pasto, prepararon la ambientación del templo, realizaron la limpieza, dispusieron todo para la previa de la porotada. En las casas junto al lago, Celia, Ana, Mercedes, Francisca, Ángel… preparaban las pizzas y empanadas, refrescos, chocolates, y por sobre todo la presencia que se hace hospitalidad.

Desde Río Branco: Waldir, Carmen, Luis, Dora, Picoco, Marita… aprontaban el contenido de la olla, el vino de ananá  y la torta para el festejo de los aniversarios y cumpleaños. También los riobranquences: Romina, Barbara, Fabio, junto a los melenses: María, Mónica, Felipe, Federico, vinieron al  Lago Merín a preparar el nido de la casa común para los peregrinos que aprontaban sus corazones y sus  mochilas, en distintos departamentos del país: Soriano, Salto, Flores, Tacuarembó,Montevideo, y desde los países hermanos Argentina, Brasil, Bolivia y Chile. Los primeros en llegar desde lejos fueron Silvia y de Salto y Leo de Carmelo, y los últimos en partir.

Gracias a los medios de comunicación y a la oración, desde diversos lugares de la Patria Grande llegaban saludos y energías  que estimulaban para que todo saliera muy bien. Con un sorprendente cambio que nos movilizó a todos, la internación y la pascua de Héctor, papá de nuestro amigo Roberto Flores, quien había sido el primero en confirmar su participación y como lo decía el mismo: “después tuve que renunciar con amor y serenidad para quedar a cuidar a mi papá, el cual fue elegido en las vísperas de encuentro para volver a Dios y desde ahí poder hacer presente la bandera Chilena en el Lagunazo”, poniéndole calor al encuentro de invierno.
También muy agradecidos estamos a Radio Río Branco, Tv. Cable, el canal 38, el Portal del Lago, Laguna Merin.nec y al semanario Tribuna Popular, que nos permitieron en la previa, hacer llegar la invitación de manera extensiva.


PRIMER DÍA: Día de la celebración de la Independencia Nacional, sábado 18 de Julio. Como es costumbre en nuestros encuentros que llamamos de “los Colibríes” hay una libertad para la participación, la llegada y la partida. Entonces Estuvimos los que quisimos y los que pudimos, cada cual llegando y estando en el tiempo de sus posibilidades. Para unos las condiciones fueron las más favorables. Otros tuvieron que optar entre otras buenas propuestas, tuvieron obstáculos a súper, distancias a recorrer, dolores que cargar, incomprensiones que soportar y fragilidades interiores que dominar…
También en la construcción de la espiritualidad que va caracterizando a la convocatoria que hacen los colibríes, los locatarios son fundamentales, en este caso los laguneros. Y siempre llegan a tejerse en el encuentro espiritualidades como la franciscana, la salesiana,la  de Foucault, la Ignaciana, la Mariana, Evangélicas, y otros grupos organizados. En este encuentro se tejieron : “los pastoralitos”, las laicas consagradas de Monseñor Cabalero,  integrantes de la Fazenda de la Esperanza, el Movimiento por la Tierra (creado en Cerro Chato) y las comunidades de Base: “el Pastito” de Casabó y de San José obrero de Río Branco.
El traslado fue en:  auto, ómnibus, moto, bicicleta, avión y a pie. Algunos en bandada y otros en solitario, siendo parte de un proceso que se viene gestando o participando por primera vez. La diversidad de edades y de estados de vida es otra característica bien visible y poco común, que se da en el encuentro de los colibríes. Niños, adolescentes, jóvenes, adultos, ancianos, estudiantes, obreros, jubilados, profesionales, hijos, padres, abuelos, casados, en pareja, divorciados, volviendo a comenzar, solteros sin compromiso, consagrados…

EL ALMUERZO Y EL RETIRO ESPIRITUAL,son y fueron  espacios que  dieron la posibilidad de compartir los carismas y talentos en bien de todos. Donde algunos cocinaron, otros  hicieron mandados, otros  matearon, recibieron, lavaron, limpiaron, pusieron  música, coordinaron, comunicaron, hicieron de taxista, pusieron el dinero para complementar la concreción del milagro, de la multiplicación de los panes y peces.  Si bien cada Encuentro es diferente, todo esto es  bien característico de los colibríes.
Roxana y Aníbal fueron los que nos acompañaron en el retiro espiritual, para que nos encontremos con nosotros mismos, con los demás y con el Dios de Jesucristo. Sorprendidos gratamente por el regalo de una tarde de sol, cálida, que nos permitió reunirnos en el patio del fondo, con cantos de pájaros  y los perritos  danzando  entre nosotros. Distinto a un baile de carnaval, aquí no hubo enmascarados. Brotaron lágrimas de dolores profundos, y sonrisas por la alegría de lo realmente bueno que descubrimos dentro nuestro. Y se teje en esta experiencia comunitaria, donde la palabra y los hechos de Jesús son el centro y único señor.
AL FINAL DEL PRIMER DÍA, unos partieron, otros se integraron. Con un momento de oración personal y otro en grupo a la luz de unas velitas, y después la cena. Donde otra vez los sacerdotes y  las sacerdotisas, pusieron en práctica su  bautismo y se pusieron el delantal voluntariamente. Con esa economía solidaria que vuelve hacer el milagro. Las guitarras, los tamboriles, las gargantas y los cuerpos, intercambiaron culturas liberadoras, de compromiso,folclórica, juvenil, románticas… Sin olvidar los diálogos personales, que sanan, iluminan, sostienen, fortalecen, despiertan sueños y esperanzas, que nos hermanan. Finalizando el primer día con la “fotos del día”. Momento de oración comunitaria donde recogemos los momentos del día que nos movieron algo de adentro. Y Erik venido de Bolivia nos compartió sus vivencias, los abrazos, de los hermanos Guaraníes, los colibríes en Buenos Aires, el chaco y la visita de Francisco (el Papa)
SEGUNDO DÍAEl domingo amanecimos bendecidos por la lluvia, lo que quizás puso en cuestión a algunos, la respuesta a la invitación a la participación en el encuentro. Unos superaron con gran esfuerzo las dificultades climáticas. Otros no pudieron, cuidando como es debido su salud o la de los otros. Y otros quedaron disfrutando del calor de la cama.
Mientras que la porotada se cocía a fuego lento, por medio de Radio Río Branco, nos permitía compartir con toda la región del campo, pueblos y la ciudad, la buena noticia a través de la homilía realizada por Roxana. Sumándose una entrevista realizada por Sandra y José a las visitas: Yanahina de San Paulo Brasil, Paola  de Buenos Aires Argentina, acompañadas de  Herminda de Formosa Argentina.
MISA DE ACCIÓN DE GRACIAS, como estaba previsto a las 11 de la mañana, el sol nos hizo una guiñada permitiendo que nos arrimamos a la capilla Stella Maris del Lago Merín, para comenzar cantando con alegría la eucaristía. Un número simbólico de presencias 77, que nos recordaban la infinita misericordia de Dios, que es capaz de perdonarnos setenta veces siete nuestros errores. La alegría se trasmitía y contagiaba en la asamblea sentados en rueda, que permitía la mirada a los ojos. Con el agua bendecida como centro en una vasija de barro, arriba de una zaranda indígena hecha de mimbre entrelazado.
Junto a la mesa que servía de altar, muy bien decorada con arpillera, mantel y flores. Todo iluminado por un sol resplandeciente, desde un panel de color cielo, sobre la foto de Francisco (el papa) que nos decía: ”Lo más lindo, lo más profundo, y lo más bello… El vino nuevo, la Familia nueva, El amor nuevo, lo mejor está por venir para ustedes”.  “La Eucaristía no es un premio para los buenos, sino la fuerza para los débiles, para los pecadores es el perdón, es el alimento que nos ayuda a andar a caminar”.

Silvia dio la bienvenida. Aníbal proclamó el evangelio y “Nacho lo encarnó en el momento presente, llevándonos hasta los huesos, permitiéndonos la hermosura de reencontrarnos con el verdadero Dios” (Iliana Da Rosa Arias). Ese Dios que es capaz de transformar el agua impura, sucia, en el mejor vino para que la fiesta del amor sea posible y continúe. Deseo de ir  volviendo al evangelio, invitándonos a acercarnos a comulgar y a invocar la bendición de Dios para nuestro caminar como familia.

BENDICIÓN  FAMILIAR El matrimonio locatario: Celia y Daniel con cincuenta años festejados de caminar juntos, invocaron la bendición para Carmen y Waldir. Que quisieron agradecer de manera particular la gracia de Dios, de alimentar ese amor que les ha permitido transformar otras experiencias anteriores… en un buen vino de familia grande en la Iglesia, festejando las bodas de plata matrimonial. Ellos emocionados derramaron esa bendición recibida, con todas las parejas y matrimonios presentes.
Finalizando la celebración con la oración que Jesús nos enseñó, reconociendo a Dios como nuestra madre y padre que nos hermana entre nosotros. Y le prestamos nuestro cuerpo al Espíritu para transmitirnos la paz en tiernos y fuertes abrazos…
POROTEADA DE ALMUERZO, realizada por muchas manos, con Luis como referente. El templo se transformó en comedor y aparecieron refrescos, galleta, bombones, tangerinas de postre.  Sin faltar la torta, el beso, el que los cumplan feliz, acompañados por el vino de ananá. Impresionante contemplar cómo
 “los amigos de los amigos se habían hecho amigos entre sí,
 formando una sola familia”... 
He aquí el gran milagro que aconteció en pleno invierno en el Lago Merín.