Fuimos invitados a celebrar la "hoguera de San Juan" en Quebracho.
No hay capilla, nos esperaban en el Centro Comunario, con el chocolate en una olla de 50 litros, conociéndose lentamente. Poco a poco fueron llegando los vecinos. Me sorprendió que llegarán en FAMILIA. Matrimonios, jóvenes, niños. La mesa fue recibiendo " las bolsitas" que cada uno traía, con torta, pasteles, galletitas...
Comenzamos invitando a escribir en un papel, aquello que queremos "hecha al fuego, quemar". Tristezas, dolores, equivocaciones, actitudes. Todos lo hicieron y se junto los papeles en una bolsa que luego fue echada al fuego.
Como era la fiesta de San Juan no podíamos dejar de mencionar a quien el anuncio: Jesús. El que nos perdona y muestra el camino verdadero de vida. Con el sirio pascual expresamos los deseos personales y para la comunidad.
Tuvimos muy presentes a los abuelos, familiares y amigos fallecidos... creyendo que gozan de la luz eterna por la infinita misericordia de Dios.
Llegó el momento de la fogata... luego la torta con chocolate y después lotería. Un encuentro fraterno entre vecinos.
Como somos una familia grande, como somos un " mar de fueguitos" y la oración supera toda distancia... rezamos en especial por el Amigo Julio, que viajó esa noche para amanecer en Suiza junto a su familia. Llego bien con sus tenis, baquero, camisa, sonrisa y equipaje... con nosotros acompañando su vuelo.
Es tan grande el tejido que se da "rezando y practicando el "Padre Nuestro" reconociendo a Dios como Padre de todos, reconociéndonos hermanos... que comunicándonos con Rosita, ģuarani de bolivia, hoy viviendo sus votos como religiosa, nos compartía el dolor y la esperanza por los sacerdotes jesuitas asesinados en México. Pertenecen a la diócesis indígena donde ella realizó su noviciado. Hay esperanza que esas muertes mejoren la seguridad de las comunidades, si logran la justicia de apresar a los asesinos... que apoyados por la tala ilegal, el narcotráfico y la minería... hoy son los que mandar.
Al ser parte del tejido "mar de fueguitos" apoyamos a Nilo en Brasil, que como maestro junto a los educadores "marcharon" reclamando el injusto aumento del 3% cuando todo ha subido mucho más. 
Carolina desde Bolivia, celebrando el Lucero del alba, en su cultura Guaraní... también siguen apostando por afirmar y trasmitir "su idioma" que va unido a un " modo de ser.
En Melo era la fiesta patronal de la capillita San Juan Bautista y de el centro Juvenil Los Pica Piedras. Una linda misa acompañados por Pablo el obispo. No faltó la fogata.
Y que fiesta !!!! entre vecinos se armó. Siempre hay artistas que apoyan lo popular, lo social. Las fiestas en que participan y se alegran los "más pequeños" son alegría de Dios.
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Nuestras culturas originarias del sur, tejen lo espiritual, la creación, la comida compartida, con la danza, el baile... que lindo que una capilla tenga lugar para todo eso... Somos vida y la vida es también cuerpo y movimiento.
Desde el SUR, los Mapuches nos recuerdan que hay " otras creencias" también en sintonía con la creación y el creador. Nos los recuerda Herminia desde Chile y manda su bendición:
Küme ayihukonpape tüfachi We-tripantu Que comience con alegría este nuevo año
TODO
EL QUE NO DESPARRAMA
AMONTONA ....
TODO LO BUENO
PARA EL BUEN VIVIR
ES FUEGO
DEL ESPIRITU DE DIOS....
Un hombre en la costa de Colombia, pudo subir al alto cielo.
Y a la vuelta, contó.
Dijo que había contemplado,
desde allá arriba, la vida humana.
Y dijo que somos un mar de fueguitos.
- El mundo es eso - reveló -.
Un montón de gente, un mar de fueguitos.
Cada persona brilla con luz propia entre todas las demás.
Y a la vuelta, contó.
Dijo que había contemplado,
desde allá arriba, la vida humana.
Y dijo que somos un mar de fueguitos.
- El mundo es eso - reveló -.
Un montón de gente, un mar de fueguitos.
Cada persona brilla con luz propia entre todas las demás.
No hay dos fuegos iguales.
Hay fuegos grandes y fuegos chicos
y fuegos de todos los colores.
Hay gente de fuego sereno que ni se entera del viento,
y gente de fuego loco que llena el aire de chispas.
Algunos fuegos, fuegos bobos, no alumbran ni queman;
pero otros, otros arden la vida con tantas ganas
que no se puede mirarlos sin parpadear,
y quien se acerca, se enciende.
Hay fuegos grandes y fuegos chicos
y fuegos de todos los colores.
Hay gente de fuego sereno que ni se entera del viento,
y gente de fuego loco que llena el aire de chispas.
Algunos fuegos, fuegos bobos, no alumbran ni queman;
pero otros, otros arden la vida con tantas ganas
que no se puede mirarlos sin parpadear,
y quien se acerca, se enciende.
EDUARDO GALEANO
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