No se puede estar en los dos bandos... Me sumo a los opresores con actitudes o silencios, o me pongo de parte de los oprimidos y me toca su suerte.
El domingo fue un día de fiesta para la comunidad de Fraile Muerto. Celebramos el dia de las madres. En la fe de la resurrección nos conectamos con las fallecidas que creemos que están junto a Dios. Bendición para las presentes.
Y fiesta por la primera comunión de Andrea. Un dia despues de haber celebrado por primera vez el sacramento de la reconciliación - confesión. La acompañaron su hijo, amigas y la comunidad.
Al árbol se lo conoce por sus frutos... a la persona conectada con el Espíritu de Jesús se la conoce por su trato con los considerados últimos...
Y entre las ultimas estan "las prostitutas" con su historia... La cuales en una sociedad machista, sumándose hombres de iglesias: las juzgan... condenan... sin decir nada de los hombres que las usan para satisfacer sus deseo sexuales, de poder sobre alguien y de violencia.
Por eso la homilía fue un relato sobre la prostituta del pueblo, su muerte, con la mirada de dos curas...
LAS PROSTITUTAS
NO ENTRAN DIRECTO AL CIELO
Cuentan que un pueblito alejado llegó un sacerdote joven recién ordenado. En su mente traía todos libros leídos de teología, de moral... Se sentía el salvador de la humanidad y a eso venía. Sabiendo que si hacia bien su trabajo sería trasladado a la ciudad, a alguna parroquia mayor... y quizas podria algun dia llegar a obispo...En el pueblito había un sacerdote anciano. Los años, su amor a Jesús y la misericordia recibida, le habían moldeado una personalidad cercana a la gente del pueblo, con una vida austera y amigo del silencio.
El joven recién llegado, para cumplir su propósito salvador y de hacer carrera eclesial, pidió al sacerdote anciano la predicación en la misa del domingo, que era la más concurrida.
El anciano le dejó lugar y aprovechaba para estar disponible para la confesión o escuchar a la gente.
El sacerdote joven normalmente predicaba del peligro de irse al infierno eterno. Hablaba de que mucha gente estaba en el purgatorio, esperando que por nuestras oraciones Dios le diera la entrada al cielo. Y sugería la celebración de misas, las cuales el mismo se encargaba de poner precio...
Hasta que un día murió Raquel, la prostituta más conocida de la taberna del pueblo. Nadie pidió una misa por ella. Pero el cura anciano anunció que el domingo siguiente celebraría la misa de séptimo día por Doña Raquel.
Ese domingo estaba anunciado una gran fiesta en la plaza del pueblo. El alcalde estaba iniciando su postulación a ser reelegido como alcalde y traería un gran circo. Lo que hacía pensar que vendría poca gente a misa.
Eso le dio tranquilidad al cura joven. No le vendría mal sentarse a confesar. Quizás también llegará a oídos de su obispo que él dedicaba horas a la confesión. Pero en el fondo sentía que se salvaba de celebrar nombrando a Raquel...
Ese domingo vino gente de muchos lados a la fiesta del pueblo. Y justo media hora antes de la misa se desató un fuerte temporal. Entonces se terminó la fiesta y mucha gente que estaba en la plaza frente al templo aprovechó a guardarse en la iglesia y participar de la misa.
El templo se llenó y el curita viejo sabía que estaría siendo escuchado por el curita joven. Entonces comenzó la predicación de manera de transmitirle paz a su colega. Siempre procuro eso con todo el pueblo. Y comenzó el sermón diciendo a fuerte voz:
- Todos sabemos quien era y fue hasta el final doña Raquel.... bajó el tono de voz, miró a la fila de los hombres y agregó: muchos lo saben por experiencia.
Volvió a subir el tono para que el curita joven escuchara desde el confesionario del fondo y continuo - Raquel le costara entrar en el cielo... previamente necesita pasar por otros lugares... porque bien sabemos quien era Raquel ....
El curita joven sintió paz, seguramente el cura viejo hablaría del infierno, de la espera en el purgatorio, y las misas que alguien tendrá que pagar para darle el perdón de Dios y la entrada al cielo. Entonces ya que no tenía clientes para la confesión y sabía lo que el cura viejo tenía que decir... aprovecho a leer el último libro sobre moral.
El curita anciano lo vio dedicado a la lectura y se sintió libre de continuar su prédica:
- Doña Raquel antes de entrar en el cielo tendrá que pasar por tres lugares:
1 Tendrá que pasar por una piscina que hay en la puerta del cielo. Con agua termal. La recibirán los ángeles para limpiarla, peinarla y perfumarla.
2 Después será llevada a una ropería donde podrá elegir un vestido, un anillo, y unas sandalias de las que usan las reinas.
3 Y en tercer lugar, los ángeles la pondrán frente a Dios mismo y este le preguntara: ¿ Aceptas mi Amor?
Será un momento único en la vida de Raquel, a la cual nunca nadie le preguntó nada, todos se le imponían.
Será un momento maravilloso para Raquel al verse limpia, perfumada, vestida de reina, ante Dios mismo, que le ofrece su Amor...
Culmina el relato que con los años falleció el sacerdote anciano.... y unos años después llegó la hora al sacerdote que había sido joven alguna ves... y al llegar al cielo, Dios padre había encargado la puerta del cielo, a una señora llamada Raquel. También le toco recibir a unos cuantos hombres del pueblo, hombres de otros pueblo. También a mujeres y entre ellas a quienes fueron llevadas a la prostitución...
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