II SEMANA DE ADVIENTO 2023

 

Inició del Adviento
Cuidando la Casa Común 

II Semana del 4 al 10 de diciembre

UN DIOS NECESITADO DE LOS HOMBRE Y MUJERES

 PREPARAR: La mesa con un mantelito, una velita para ser encendida, y la biblia señalada en Marcos 1, 1 - 8. Poner sobre la mesa herramientas de trabajo manual ej: martillo, cucharon, repasador... También si es posible los Pastores del pesebre.  

COMIENZO: Invocar la presencia de Dios: en nombre del Padre, el Hijo y el Espíritu Santo. Dar la bienvenida si hay alguien nueva. Informar la razón de alguna ausencia. Un canto si fuera posible.

INTRODUCCIÓN: El domingo anterior en todas las parroquias se encendió la primera velita de la corona de adviento. Propusimos comenzar a armar el pesebre y reflexionar y rezar por la casa común. 

Esta segunda semana veremos como Dios necesita de personas comunes para que el pueblo se encuentre con Jesús y su propuesta salvífica. 

Comenzamos valorando el trabajo manual. Se pasa la velita encendida de mano en mano, y cada persona dice un trabajo manual que lo haga con gusto, ej: cocinar, limpiar, la quinta, cuidar...

PALABRA BIBLICA: Comienza el Evangelio de Jesucristo, Hijo de Dios. Está escrito en el profeta Isaías: «Yo envío mi mensajero delante de ti para que te prepare el camino. Una voz grita en el desierto: "Preparad el camino del Señor, allanad sus senderos."»

Juan bautizaba en el desierto; predicaba que se convirtieran y se bautizaran, para que se les perdonase los pecados. Acudía la gente de Judea y de Jerusalén, confesaban sus pecados, y él los bautizaba en el Jordán. Juan iba vestido de piel de camello, con una correa de cuero a la cintura, y se alimentaba de saltamontes y miel silvestre.
Y proclamaba: «Detrás de mí viene el que puede más que yo, y yo no merezco agacharme para desatarle las sandalias. Yo os he bautizado con agua, pero él os bautizará con Espíritu Santo.»

Palabra del Señor

COMENTARIO:  Dios así como eligió a una jovencita de un pueblito de nazaret, a Maria, tambien elije a Juan un hombre pobre hijo de la pareja de ancianos Isabel y Zacaría. Sus herramientas de evangelización son : su testimonio de vida y su palabra.

En navidad, Maria y Jose se tienen que alojar en un pesebre, cueva o establo destinado a los animales, porque las puertas de las casas de la gente se cerraron. Y los primeros que se acercaron a hacer compañía y compartir lo poco que tenían, fueron los pastorcitos. Trabajadores pobres que descansaban en esas cuevas o establos junto a los animales. La mayor de la veces no tenia salario, trabajaban por la comida. Eran la clase mas baja, junto a los delincuentes, enfermos, impuros,  de la pirámide social.

Hoy en dia hay un mayor reconocimiento de los trabajos de la casa, trabajos rurales, de limpieza de la ciudad, trabajos de cuidado de niños, adultos y enfermos... Pero aun los salarios son muy por debajo del valor que tienen estos trabajos, que son de cuidado de la vida. ¿Se imaginan una casa, una ciudad sin quien la limpie? ¿Se imaginan los niños ancianos enfermos sin cuidadores? ¿Se imaginan una sociedad sin personas que se dedique a la producción y elaboración de alimentos? ¿Se imaginan un pueblo sin albañiles, comerciantes, policías,  trabajadores municipales, comerciantes...?   

ORACIÓN: Volvemos a pasar la velita de mano en mano, y cada uno expresa su oración de agradecimiento o pedido, por alguna situación concreta laboral, personal, de alguien de su familia o  de la sociedad. 

COMPROMISO: La segunda velita de la corona de adviento a ser encendida es verde ESPERANZA . Propuestas: 

- Es un buen tiempo para celebrar el sacramento de la reconciliación. También para buscar acercarse a un familiar o vecino distanciado.

- Mirar el valor que le dan a nuestros trabajos manuales de cuidado, limpieza.... y mirar el valor que le damos a quienes nos ofrecen esos servicios. Ej: Compartir un vaso de agua fresca con las barrenderas de nuestra ciudad o un regalito de navidad. 

- Colocar en el pesebre "los pastorcitos" pero también alguna herramienta de trabajo que recuerde a nuestros padres, abuelos que nos cuidaron.