CUANDO SUCEDE ALGO INESPLICABLEMENTE DOLOROSO - IV DOMINGO DE ADVIENTO

 

A mami le ha dado el alta... y aparecen ángeles de todas partes. En la foto mami en contenta en casa, cuidada por Dahiana y su hija Ofelia. Aparecieron ángeles en el sanatorio, en el hospital y ahora en casa. 

En este momento sorpresivo de dolor para mami, muchas personas han ofrecido un servicio con Amor y otras han comunicado por estos medios su apoyo anímico y por medio de la oración. En todo momento he podido ver la mano de Dios... 

En estos días me toco andar en la vuelta del sanatorio, porque mi madre se cayó “con mucha suerte”, y solamente tuvo que ser enyesada de un brazo y unos puntos sobre la ceja izquierda.

Un médico amigo, me hizo una cachada. Sabiendo que me gusta el futbol, y se estaban jugando las semifinales del mundial, me dijo que mientras el atendía a mi madre, al fondo del pasillo había una sala con dos pantallas, encendidas.

Inmediatamente seguí sus indicaciones y me encontré con las dos pantallas una apagada y otra encendidas. Pero no se veía futbol en ellas. Era la sala donde se hacen ecografías.

Es algo inexplicablemente maravilloso poder ver la vida de un niño dentro del cuerpo de su madre, en la pantalla conectada.

La otra no mostraba nada, porque en ese momento estaba desenchufada. Simplemente se veía lo que se ve a simple vista, en la cama una mujer con una gran panza.

 ILUMINAR: En este cuarto domingo de adviento, la Palabra Bíblica nos presenta a Maria comprometida con José, soñando juntos el casamiento, ella misteriosamente empieza a mostrar “una pancita fruto de un embarazo”.

José ve el cambio del cuerpo de Maria. Sabiendo que no habían tenido relaciones sexuales, al verla embarazada, tenía que denunciarla, para que fuera juzgada y apedreada por cometer adulterio. Pero la Amaba tanto, que pensaba irse del poblado en secreto silenciosamente, destrozado por dentro

Dios le mando un Angel a José, para que le explicara lo que parecía incomprensible. Y José creyó, y la tomo como esposa a Maria, haciendo lo que el ángel le ordeno y la llevo a su propia casa. Seguramente ante las miradas que los juzgaban por  “la pancita” que veían en Maria.  Mateo 1, 18 – 24

REFLEXIONAR: Hay momentos de nuestra vida en que se nos prestan situación “inexplicables o incomprensibles”, por algo que nos sucede a nosotros mismos o a una de las personas cercanas. Lo real que vemos es algo que nos causa un profundo dolor.

Al igual que la ecografía se ve muy distinto la misma realidad, cuando estamos desconectado de lo trascendente, de Dios… solamente vemos lo que ven todos a simple vista.

Cuando hemos recibido el don de la fe, y lo hemos cultivado, esa conexión con Dios nos permite hacer una ecografía interna de la situación y descubrir la vida de Dios en cada circunstancia.

Dios siempre nos manda ángeles, personas que nos acompañan a ver el Espíritu de Dios, engendrando una vida inédita, ahí en esa persona o situación que nos causa un gran dolor.

ACTUAR: La propuesta para esta cuarta semana de camino a un nuevo nacimiento de Jesus, es darnos tiempo para tomar conciencia “de que es posible para cada uno de nosotros “conectarnos” con Dios Padre, hijo y Espíritu Santo.

Estar atentos o buscar “los ángeles” que Dios nos envía en esos momentos de “incomprensión – dolor”. Ellos escuchándonos, comprendiéndonos, nos ayudaran a ver más allá de lo que todos ven…. Nos ayudaran a ver el Espíritu Santo fecundando una vida nueva, aunque parezca que todo está mal, Dios siempre engendra bien.

Y ahí se nos presentara como a José, una situación que tenemos que asumirla, cuidarla, es frágil, porque es como Jesus pequeño, necesitado, en navidad.  No será fácil, porque en todo tiempo está la amenaza de los poderosos Herodes. 

Pero conectados a Dios, asumiendo el proyecto de Dios, que nos puede cambiar nuestros proyectos, como el Espíritu Santo – Jesus – el padre -  se los cambio a Maria y a José. Si es de Dios, si es Dios con nosotros, nadie podrá contra nosotros.