Camiri es una de las pocas ciudades grandes que recorrimos en nuestro viaje y que tiene hasta varias Universidades y museos, pero lo que nos llevó allí no fue esto sino el deseo de conocer el Centro de Salud “Teko Guaraní” del cual Francesco es uno de los referentes y que funciona gracias a un convenio entre el Ministerio de Salud de Bolivia y el Vicariato.
Para ponerlos un poco al tanto de la historia, Francesco es un laico italiano que fue de misión a Bolivia hace ya muchos años y le apasionó tanto lo que vivió en las comunidades decidió quedarse y se enamoró tanto de esta tierra y de esta gente que formó una familia allí con su esposa Yenny y sus hijos, Yassi de unos 6 años y Mario de unos 3 años más o menos según recuerdo.
Entiendo
también que allí hacen prácticas algunos de los estudiantes de enfermería de la
escuela Tekove Katu del pueblo de Gutiérrez de la cual intenté dar un pantallaso
general en una memoria anterior.
Aquí en Camiri también fuimos recibidos con toda la hospitalidad y el aprecio posibles de parte de todos y especialmente de Francesco y de su familia, que siempre se acuerda con mucho cariño del padre Nacho y de todo lo que lucharon y lograron trabajando juntos por el pueblo Guaraní y nos hicieron un recorrido guiado por el Centro durante el cual compartimos la realidad sanitaria de Bolivia (que aunque me duela decirlo está en todo sentido mucho más atrasada que la nuestra) y las necesidades y sufrimientos que pasan aquellos que no pueden acceder a la salud privada y cómo eso los motiva a seguir trabajando día a día a pesar de las dificultades diversas que se les plantean por carencias de todo tipo para seguir trabajando para que los más humildes puedan acceder al menos a los servicios básicos de salud.
Realmente
son un ejemplo a seguir todos los que trabajan en el Centro y me parece muy
importante que esta experiencia se conozca para que podamos aprender de ella y
sacar adelante emprendimientos necesarios en los barrios de nuestras ciudades o
pueblos y para no dejarnos vencer a veces por el derrotismo o por el “no se
puede”… éste es un excelente ejemplo que con voluntad, trabajo y la ayuda de
Dios, SÍ SE PUEDE!!!
Como parte cultural e ilustrativa de la visita, luego del almuerzo recorrimos el Museo Histórico de Camiri.
Finalizando
el relato les comparto una foto de una de las entradas de una plaza de la
ciudad con un lema muy significativo y un video de Francesco con un saludo para
que lo sientan más cercano…
Abrazo
fuerte a todos y especialmente a aquellas personas que me han ayudado a hacer
memoria en estos días!!!
Leo,
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