Hoy en la Fazenda Betania, compartíamos que mucha gente les gustaría que los soldados Ucranianos y Rusos... "se sacarán el uniforme que los enfrenta y se reconocieran igualmente humanos...hermanos"
Es fácil decirle al otro que se saque su uniforme... lo difícil es sacarnos el nuestro... y sólo aquella persona que se va liberando de etiquetas, puede ir viendo lo que hay debajo de las etiquetas de los demás.
A veces nos pasa también a nosotros: con un trabajo, estudio, persona, institución, algo material, un rol... somos poseído por eso de tal manera que es con lo que nos identificamos... y por eso nos cuesta un montón centrarnos en Jesús y se nos pasa la vida... En otros momentos nos dejamos guiar por Jesús y el nos hace vivir y dar VIDA.
Recuerdo las palabras de Daniela anunciando este viaje: voy porque quiero ir, nadie me manipula y me cuesta dejar este lugar y comunidad donde estoy creciendo y estoy comoda para ir a un lugar desconocido ... porque en el silencio, en la oración Jesús me confirma este viaje propuesto por las responsables.
En Tacuarembo, los esperaba Verónica. Y quería agradecer a Dios y que Dios hábitats en su nueva casa, pidiendo se la vendijeran. Algo que no estava previsto al partir y pidió tiempo...
Así como hace más ruido un árbol que cae, que un monte que crece, aquí tenemos a Verónica a dos meses de haber hecho su caminata en la Fazenda, para liberarse de su adición y encontrar un sentido nuevo a su vida con Dios... la vemos una mujer nueva en medio del mundo. Son unas cuantas unos cuantos los que se levantan y caminan...
Dios es providente... nuestro amigo Damián después de la mitad del camino a "solas" en Tacuarembo encontró compañía para el regreso a Melo... Dios todo lo hace bien... y a veceses nos frenas los miedos.... confiemos en el....
