Sin duda que los medios de comunicación bien llamados «El «cuarto poder», son vital para la Democracia y para los negocios. La prensa, tenemos el poder de resaltar noticia y esconder otras. Lo que sin ninguna duda apoya gobierno, instituciones, personas o las debilita. Es capaz de transformar el sentir colectivo, que hoy en día es más afectivo y menos reflexivo. «Una imagen vale por cien palabras». «Lo dicho, dicho esta». No importa cuánto de verdadero es y que oculta, pero si se dice en un medio de comunicación poderoso y se repite «es verdad» aunque no lo sea, o lo sea a medias.
Hoy consumimos información con pocos espacios de debates. No hay tiempo para masticar, para analizar, y menos para relacionar un acontecimiento con sus actores, intereses y relaciones. Todos tenemos la posibilidad de leer los titulares del mundo entero, con distintas miradas, pero escasean los espacios para el dialogo familiar, entre vecinos y en la sociedad. Con frases colonizadoras «se pierde mucho tiempo en discusiones hay que ser mas prácticos», se ha desprestigiado las asambleas y comisiones, para dar lugar al regreso de los caudillos y de los mesías. Si bien toda actividad humana se da dentro de estructuras, se ha insistido en la «lentitud y corrupción de las estructuras institucionales», planteando salidas por «fuera», sostenidas por organizaciones «no visibles» pero muy bien coordinadas en sus intereses de poder y económicos.
Hoy nos dan posibilidades de unas vacaciones o fin de semana «a lo rico» lo que nos hace ali-mentar el deseo, esclavizarnos del trabajo, o salir a robar para alcanzar esa vida. Para nada nos cuestionamos su costo ecológico, social. Se dice «que los políticos debería bajar sus sueldos» sin ni siquiera publicar cuánto ganan jefes y gerentes de determinadas empresas; nunca se hizo una protesta masiva por lo que ganan los deportistas de élite, con todos los negocios invisibles empresariales y de los otros que hay detrás de estos circos.
A nivel mundial, «el cuarto poder» desestabiliza las estructuras sociales, políticas, vende circo y ocultar sus grandes negocios.
Algunas preguntas que nos ayudaría a ver la realidad desde otro lugar:
*¿Cuales son los países que protegen las grandes fábricas de armas?
¿Quiénes son las personas y corporaciones accionistas de estas empresas?
*¿Quiénes son los proveedores de droga en cada país?
Los cuales necesitan tener otros negocios para blanquear su imagen y el dinero,
muchos de ellos son persona reconocida das socialmente.
* Detrás de cada gran eventos, deportivo, musical… ¿Qué se vende?
* ¿Quiénes compran las cosas robadas?
* Las mujeres, los niños y los pobres
son los más usados y perjudicados en todo esto.
Por eso es buena pregunta ante cualquier propuesta:
¿Qué lugar y que tipo mujer y de niños promueve tal o cual evento
propagandeado por el cuarto poder?
El Colibrí
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