Yo estuve en la final “PEÑAROL - SANTOS”

El abuelo nos contaba que había sacado de su jubilación “lo justo para la entrada
al estadio”.
Nos contaba que cuando caminaba por el parque Batlle, (rumbo al Centenario)
quedó sin un peso.
No dijo si se lo robaron ó si perdió el dinero.

El abuelo decía que en la puerta del estadio se encontraron con la barra y él
contó su desgracia: de no tener dinero.
El “Quico” con su expresión en la cara y la media vuelta que se dio, expresó que
no creía que el abuelo dijera la verdad.
Al “flaco” le faltaban cinco vintenes para completar su entrada (no tenía para él,
¿cómo iba a compartir?). Entonces escuchó y haciéndose el sonso se acercó al
“Gordo”.
Éste llevaba ese apodo no sólo por su masa corporal, sino también porque era el
“rico” de la barra, además era el de más estudio y de mejor labia. Por eso expresó
su pena al abuelo, pero justificó con buenas razones su actitud de no compartir.
“Carlos” era tímido y tenía una familia en buena situación. Le habían dado para
su entrada y para el festejo.
El abuelo nos cantaba que no se va a olvidar más de que Carlos se le acercó
(después que se fueron los demás) y lo invitó a caminar.
“Carlos” vendió la bandera, renunció a su merienda y sacó dos entradas.
Lo que más recuerda el abuelo es la enseñanza de Carlos que le dijo:
- «quedamos sin bandera pero entraremos juntos. Quedamos sin nada para el
festejo, pero gracias a Dios tenemos cena en casa».
« Seguro que si al “flaco”le hubiesen dado lo que me dieron a mí, de seguro él te
compraba la entrada» agregó. Del “Quico” y del “Gordo” ni hablo….

Dios da a su propio hijo, porque sabía que después de la entrega total, el hijo
volvería al Padre (Juan 3,16-18).
El que entrega su vida es porque es conciente de haberla recibido como regalo y
confía en que en la entrega está la ganancia final.
En el partido de la vida
están los indiferentes (Quicos), los enriquecidos (Gordos), los pobres, los
empobrecidos y muchos Carlos (sienten la vida como un regalo )…
Éstos han ganado más que en la “Libertadores”, han logrado la Libertad de sus
cosas, de su ego, compartiendo lo recibido.