Feliz 96 años de doña Dora

 

Es verdaderamente una bendición, poder despertar y ver en la cama de alado el rostro de mi madre. Quizás es un sentimiento semejante a quienes ven el rostro de su hijo, o de su pareja… Quizás con esa ternura nos mira Dios a cada uno de nosotros, a todos. y lo que más nos asemeja a Dios es poder mirar con ternura a los demás especialmente a los que menos ternura han recibido.

Le vacié la pinica, la desperté y le traje el desayuno. Después le di el beso y saludo di cumpleaños.

- ¿Hoy es 20? Me preguntó.

- Así que llegamos a los 96. Agregó.

Con alegría de que estuviese clarita le respondí afirmativamente. Y se durmió como todas las mañanas hasta el mediodía.

Me regale volver a contemplar su rostro, y surgieron recuerdos. Uno de ellos era cuando siendo niño pequeño, le tocaba la panza a mi madre y le pedía un hermanito. Muchas veces he agradecido a Dios, porque no me dio un hermano, sino unos cuantos, varones y mujeres, en cada lugar que él me ha enviado. Pero hoy ocurrió algo diferente, el centro era mi madre que cada vez necesita más cuidado. Y realmente me maravilla ver el cariño que le han dado a ella, y que hoy le tienen. Gracias, gracias…

Hoy fue un cumple a su modo, según sus posibilidades de cómo se siente, un cumple pequeño. Que fue respondiendo alguna llamada por teléfono, escuchando algunos saludos que le leía… Con un almuerzo donde le pregunte que quería comer y me dijo: 

- Un poco de arroz blanco y si es posible con algo de carne. Lo que quieras te voy a buscar mami, fue mi respuesta. Y ella reafirmo el pedido y me dijo: 

- Nacho, es bueno comer arroz agradecidamente, fue lo que gracias a Dios nunca nos faltó… A lo que agregue, y con milanesa los domingos. Mami sonrió, quizás sabiendo que es muy bueno que yo no olvide esos años de mi niñez. Nuestras “pobrezas” bien recordadas, nos pueden ayudar a ser agradecidos… Y también nos da autoridad para decirle a alguien:

- Comprendo que te duela lo que te falta o lo que perdiste, pero se puede seguir andando, lo mejor está por venir junto a otros...

En nombre de mi madre, quiero agradecer por cada momento de la historia compartido. Hoy los que pudieron estar de Fraile muerto, Rio Branco, Treinta y Tres-Vergara, y Melo… representaban a todos… y fueron quienes hicieron el cumple… No solo tengo hermanos para disfrutar, también hermanos para cuidar a mi madre.

PALABRA DEL DIA: 

- Eviten TODA clase de avaricia, porque la vida del hombre no depende de lo que posea... Lucas 12, 13 - 21

A la tarde después de la siesta, la ayude a levantarse y nos sentamos afuera. Apareció Mabel con un regalo, que dentro tenía ticholos. Y que regalo me hizo… A cada uno que pasaba por la vereda le ofrecía un ticholo… Me recordó que los regalos son para compartir con todos los que pasen por nuestra vida. Incluso más tarde estaba muy atenta un perrito que apareció en la puerta y me pedía que le diera algo. Como siempre decimos: podemos dar lo recibido. Todos tenemos carecías, pero todos hemos recibido la vida y algo, y eso nos pide Dios que lo recibido lo compartamos con los demás… Y si lo hacemos, a nadie le faltará nada, porque alguien nos dará lo que no tuvimos. La pobreza y la miseria no es causa de carencias, es causa de avaricia, de no compartir lo que se tiene, creyendo que es solamente mío o para los mío... Cuando nosotros los que nos reconocemos "carentes" nos encontramos como hermanos, se multiplica todo… Cuando no compartimos, nos volvemos obesos-ricos en algo y eso nos enferma de superioridad…

Gracias, Gracias por tanto compartido… y que siga la fiesta en cada encuentro… que cada uno de lo que tenga, recordando que de alguien lo recibió y es para compartir, especialmente con quien no tenga… y ese nos dará lo que no tenemos…

Un abrazo agradecido Nacho