¿ CÓMO SEGUIMOS DESPUES DEL RETIRO?

Hoy a la mañana siguiente al retiro, con Julio, tuvimos la gracia de tener tiempo, para compartir el mate y el pan, en una celebración mística - masticando -saboreando, lo que Dios nos había permitido vivir en ese encuentro con Dios y los próximos este fin de semana. 

Recordamos que hasta una araña tiene algo hermoso para enseñarnos. La especie conocida como matrifagia: Las crías se comen a su madre, ella les ofrece su propio cuerpo como recurso nutricional, un proceso que asegura la supervivencia de la especie donde la madre da su vida, para que vivan sus hijas. 

Jesús también quiso quedarse "como alimento" a ser comido... diciendo que: no ha venido para los que se consideran sanos y buenos, si, para los enfermos y los que se reconocen necesitado de perdón. 

Recordamos que Dios es Amor en la comunidad que se reúne en su nombre. Recordamos uno a uno (60 nombramos, incluyendo a alguien en brazo y los con bastón) unidos felices, cada uno siendo lo que es. Donde hubo lugar para el silencio en escucha, la Palabra la tuvimos todos y todas, siendo el dolor compartido un abrazo al alma, complementado con los abrazos tiernos de cuerpos de corazón, que nos volvía a reconocer como personas Amadas. 

Aquí no se habló de "precio, de dinero"... a la inversa del mundo: aquí los gastos se viven como gesto de Amor, no como pérdida... Si como la inversión mejor redituable. 

Las dificultades en salud mental, las salidas de camino, las rodillas con cicatrices, las heridas abiertas, e incluso la pérdida de seres queridos... acá fueron abono de resurrecion para la mayoría y encuentro profundos en los abrazos. 

En un tiempo de comidas rápidas y chatarras... sin tiempo para el mastique, sin tiempo para la sobremesa del encuentro... la propuesta del retiro fue: dar lugar a la contemplación, al mastique de la vida. Por eso proponemos: cerrar los ojos por un instante, escuchar, sentir, "que fotos, que momentos de lo vivido recordamos, y vuelve a salir del cerrazón. 

También hay personas que son como la Cananea que convirtió a Jesús, valorando las migajas de pan que caían de la mesa... Hay personas que participando poco tiempo o incluso sin haber podido estar presente físicamente, disfrutan por medio de la "escucha", cuando alguien le cuenta o por la escucha por estos medios. Por eso invitamos a sumar comentarios... para seguir alimentándonos unos a otros, con lo que el Espíritu nos permitió ver, saborear y vivir.  

Nacho