BAUTISMO DEL SEÑOR: "Dios se presenta siempre en medio nuestro como un necesitado"

VER:

         Algunos dicen que los dioses son creados por las culturas y que cada persona se hace un Dios a su manera... En la comunidad parroquial resaltamos dos noticias que consideramos encarnan hoy "el verdadero Dios de la navidad". La desarticulación de una de las tantas redes de prostitución de menores que realizó la policía de nuestro departamento. Y la confirmación de una nota periodística capitalina del uso de niños por parte del narcotraficantes... Nuestra relación con los más pequeños y con los poderosos de turno es lo que define nuestra espiritualidad.
 

ILUMINAR:
        Después de la misteriosa encarnación de Dios en la debilidad de un pequeño, nacido en la extrema pobreza de un pesebre acompañado de gente bien diversa; incluso por los reyes magos que le ofrecieron regalo en nombre de Herodes, quien quería asesinarlo. Después de tener que huir a Egipto, y crecer en Nazaret, Jesús elige su bautismo. Ante tantas propuestas religiosas de la época, fue a Galilea junto al río Jordán a recibir el bautismo de Juan. Donde se escuchó la voz de Dios diciendo "Este es mi hijo muy querido, en quien tengo puesta toda mi predilección". ( Mateo 3, 13 - 17)

ACTUAR:
       La espiritualidad cristiana es bien clara "Dios se presenta siempre en medio nuestro como un necesitado". Cuando podemos ser solidarios con alguien necesitado brota lo mejor de nosotros mismo. Sin embargo el mal de la prostitución de menores, del narcotráfico en primer lugar se presenta "con regalos" que crean dependencia y los transforman en necesitados. No se puede amar a Dios y a Herodes, y cuando me pongo al servicio de uno, sistemáticamente me enfrento al otro.

 

Hay muchas personas que han recibido el bautismo integrándose a las iglesias Cristianas, ser Cristiano es creer que los más frágiles, los más pequeños, los más empobrecidos son los predilectos del amor de Dios y que nuestro modo de relacionarnos con ellos es la puesta en práctica de la relación con Dios. "Lo que le hacen a uno de los más pequeños me lo hacen a mi". NO es repartiendo regalos, ni haciendo santuarios Marianos, como mostraban a un Narco Mexicano, que soy Cristiano; el usar a los débiles, la injusticia con los obreros me hace un Herodes. Pero SI cuando pongo como predilecto a los oprimidos y me la juego por su liberación, ahí estoy de parte de Jesús. No faltarán las persecuciones de Herodes... pero seremos lo mejor que podemos ser y la vida eterna nos espera. 

Nacho