¿ EN QUIEN TENGO PUESTA MI CONFIANZA?

Solamente una vez viaje en avión, hasta hora. Fue un vuelo considerado corto, desde Cochabamba a Sucre en Bolivia.
Lo curioso de la previa fue un importante encuentro. Esperando en el aeropuerto nos encontramos con un sabio maletero. El hombre ya anciano, cargaba los equipajes de los pasajeros desde el control aduanero hasta la oficina de la agencia de la compañía.
Le pregunte que había aprendido en tantos años en el mismo trabajo. Me contesto muy seguro de su sabiduría: - aprendí algo fundamental sobre los hombres, que lo revela su equipaje “a que se dedica”, lo revela lo que lleva en su maleta.

Continuo el anciano diciendo: -por el tamaño del equipaje, por los elementos que cada uno carga en su maleta, con los años reconocemos en que trabaja la persona, cuáles son sus necesidades preferenciales, reconocemos en que tiene puesto su corazón y su confianza.
Desde ese día conservo en mi interior las palabras del sabio maletero. Y cada vez que armo la mochila para viajar, o en alguna parada en pleno viaje o al regreso de algunos kilómetros recorridos, “miro mi equipaje”, con los ojos de aquel anciano y me pregunto:

¿Quién soy? 

¿Qué necesidades primarias tengo?

¿Donde, en que, en quien, tengo puesto mi corazón?

 ¿Que revela mi equipaje?

Nacho

Mateo (6,24-34): Nadie puede servir a dos patrones: necesariamente odiará a uno y amará al otro, o bien cuidará al primero y despreciará al otro. Ustedes no pueden servir al mismo tiempo a Dios y al Dinero.