- se de un ENCUENTRO fraterno, solidario e inclusivo.
- donde los NIÑOS sean verdaderamente felices y crezcan.
- siendo el encuentro y los mas pequeños el centro, el DINERO QUEDA EN SEGUNDO LUGAR, deja de ser el objetivo o la condición dela fiesta.
- lo CULTURAL DEL LUGAR, en la ambientación, la música, la comida, la ropa, la liturgia, el baile....es el ingrediente fundamental, Dios se encarna y no se impone. Abierto a los aportes de otras culturas, de las visitas.
- el ser humano es TRASCENDENTE, por eso busca lo RELIGIOSO, y cuanto esto tiene que ver con la VIDA, llega a lo profundo del SER, y transforma las RELACIONES HUMANAS, para bien.
- que bien nos hacen las VISITAS, en estos casos los colibríes, nos hacen poner lo mejor de nosotros mismo en la preparación, dejando de lado algunas diferencias. Que lindo que los amigos de los amigos se hagan amigos entre si.
- es fundamental DESPROGRAMARNOS de la educación familiar, y social perfeccionista. Toda actividad humana, va a tener sus faltas, sus sombras, carencias y cambios. Hay que tener flexibilidad para superar los obstáculos. Hay que saber poner la mirada en el todo y vencer al tentador que quiere centrarnos en el punto negro...
La tercera, nos trasladamos a Dragón - Placido Rosas y la misa comenzó, como estamos acostumbrados a celebrar. Con el cura detrás del altar en el frente y los demás mirándolo sin vernos o mirando la nuca de los de adelante. El ser humano se "acostumbra", incluso a lo que no fue así en sus orígenes...
La quinta, el encontrarnos de manera circular, permitió que todos tuviésemos la palabra, presentándonos, diciendo de donde veníamos
La sesta, cuando dejamos lugar para el Espíritu, él nos sorprende. La homilía la hizo Raquel. Esta mujer, relaciono lo que estábamos viviendo personas que hoy regresaban ala comunidad después de un tiempo de ausencia y otros que se integraron hoy con la fiesta. Lo ilumino con la lectura bíblica, donde los primeros discípulos querían hacer caer fuego sobre aquellos que caminaban por otros caminos, y Jesús les hizo ver y nos hace ver, que se puede aportar a su reino desde otros lugares. Raquel incluso remarco que aveces humanamente necesitamos andar por otros caminos para encontrar el camino de Jesús. Que hay que saber respetar las búsquedas, los tiempos y los posesos de cada uno.
La setima, en comunión con las Comunidades Eclesiales de Base, tomamos el signo del brasero encendido, para experimentar el perdón de Dios. Algo que siempre tiene que ser central en nuestras celebraciones: la razón de su encarnación, de su muerte y resurrección.
La novena, los gestos, ayudan a hacer visible, que todos necesitamos de perdón, también el cura ja ja ja. Los gestos si son desde nuestra cultura, dicen mas que mil palabras, permiten la participación de todos y desde dentro.
La décima, es bello, es cristiano el ambiente comunitario, cuando cada uno llega ala hora que puede llegar y es bienvenido.... Al finalizar la misa se nos habían sumado unos cuantos mas.
La décima cuarta, esa que no se ve, "EL REGRESO A LA VIDA COTIDIANA" cada cual con vivencias de ENCUENTROS, sintiendo que su presencia aporto a que fueran días de fiesta. Poniendo en practica lo del evangelio, las palabras de Jesús: Quien quiera seguirme, debe desprenderse, caminando un camino nuevo, de libertad.... Todos para estar presente tuvimos que superar algunos inconvenientes climáticos, desamarrar algunas relaciones, dar un paso de fe a lo que no sabríamos que ocurriría, aportar lo que somos, sabemos y tenemos, muchas veces luchando contra los sentimientos de que nos gustaría que otros estuvieran ahí,... Entrando en ese misterio de que al final Dios es Padre de todos y todos somos una sola familia humana. Es él el que nos convoca. No se impone. Cada cual tiene que dar sus pasos de liberación y su salto en la fe...
Nacho
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