Como el apóstol Pablo sintió el deseo de expresar a una de sus comunidades de pertenencia, los Filipenses (1, 3-7), también a mí se me inspira expresarles a ustedes esta carta a modo de oración y de agradecimiento
Brisa de Libertad:
Cuando éramos jóvenes nos acompañaron a descubrir que teníamos corazón de águila, que estábamos hechos para volar en libertad. Nos impulsaron a liberarnos de muchas cosas de este mundo, salimos de jaulas que nos proponían seguridad pero que querían dirigir nuestro destino haciéndose dueños de nuestra vida y de nuestro tiempo…
Volamos altos vuelos siendo admirados por otros de corazón de águila y condenados y perseguidos por carceleros que se creen libres pero son presos de sus prisiones materiales.
Volamos pero aún inmaduros para ser libres en plenitud, nos creamos nuestras propias cadenas a las cuales incluso justificamos diciendo que eran fruto de la libertad. Nuestro corazón de águila amó pero sufrió en esos vuelos bajos y lo peor aún fue que dañó a otros corazones…
Volamos pero un vuelo con imperfecciones de luz en los días y de confusión en las noches. A la luz fuimos elevados a los dones más elevados del amor, justicia, verdad, amando a todos desde el lugar de los más frágiles. Cuando la luz solar descansaba nuestras inmadureces juveniles buscaron otras experiencias de amor (reitero incluso en nombre de la libertad). Hasta hoy volamos con altibajos liberándonos y atándonos, liberando y encadenando…
La verdad nos hará libres dice el amigo. Esta mañana de pleno sol siento el corazón de águila emplumado nuevamente para volar y despertad vuelos de libertad.
La verdad de mis opciones presente de mi historia me libera, me hace fuerte, humilde y humano.
Si se puede, con la mirada siempre en ti e inventando a tu vuelo, no queriendo ser profesor de vuelo ya que uno puede terminar creyéndose el sol, cuando simplemente soy su fruto y su espejo, él lo es todo-todo….Siendo muy respetuoso de nuestras opciones hacía la libertad o hacía el apego…
Hoy a los 47 años cercanos a los 50 confirmo que el que tiene el corazón de águila fue creado para volar y estará insatisfecho cuando no lo hace. Confirmo que siempre hasta el último minuto el que tiene corazón de águila recibirá un rayo de sol que lo quiera elevar hacía la más alta libertad comprometiéndolo con la humanidad para darse que amar…Dios es fiel.
Saludos Nacho
“Vayan por todo el mundo, anuncien la Buena Noticia a toda la creación
(Marcos 16,15-20):
´”Jesús el que fue elevado al cielo, vendrá de la misma manera que lo han visto partir”
(Hechos 1,1-11)
• Se fue CRUCIFICADO, y sigue viniendo estando en los CRUCIFICADOS DE HOY. Y nos dice que no lo busquemos en el cielo, templos, Mesías, ritos. El sigue siendo el mismo Dios que escandalizó a los poderosos y religiosos de su época por ocupar el lugar de los ÚLTIMOS por amor a todos.
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