* Un grupo viaja a Dolores a acompañar a los colibríes, a los que ya están sirviendo
en ese lugar;
* Con Doris nos aprontamos para viajar a Paraguay al encuentro de las CEB;
* Otro grupo apronta sus alas para ir a la Patagonia Argentina al encuentro
con Zulema y su gente;
* Se siguen aprontando los detalles para ser parte del casamiento ce Cloe y
Gilberto en Colonia;
* Y del encuentro de Colibríes en
Nueva Helvecia convocados por Raquel y Andrea;
* También estamos embarazados de los encuentro en Bolivia Tekove Katu, para
el cual ya hay personas preparándose para ir al encuentro;
* Y por supuesto que no es solamente Marcelo el que confirma si participación en el VI Campamento de
Encuentro Teológico en Lago Merín que se realizara Dios mediante desde el 14 al
21 de enero del 2017;
* Teniendo muy presente que este año nacieron y están haciendo su camino de
crecimiento, de búsqueda, las comunidades orantes en Santa Cruz de la Sierra
Bolivia, la otra que está vinculada a la Parroquia Universitaria en Montevideo
Uruguay y la inserción de Silvia Sosa en la comunidad San Romero – en Rio
Branco que está en plena primavera.
BANDADA DE COLIBRÍES. Todo esto
lo estamos viviendo con las cruces, heridas, errores, carencias, incertidumbres,
que cada uno tiene en su vida personal y en la diversidad de relaciones
humanas. El caminar en bandada, el sentirse perteneciente a otros, no nos hace
mejor, ni más buenos, tampoco nos resuelve nuestros problemas, pero sí nos hace
abrir la mente, el corazón, los sueños, para ver más allá de nuestro yo y de lo
mío, para disfrutar y sentirnos parte de los vuelos y encuentro de los demás.
Pablo Quinta en cada celebración nos presta el servicio de leer los
mensajes de los que quieren estar presente desde la distancia, a lo que se
suman los saludos que cada uno recibió poniéndose en común. Por eso estos
medios y otros, son instrumento de comunión.
CELEBRACIÓN DE LA EUCARISTÍA. En las
fotos del algo de lo recogido fue:
* La presencia de la sub 20, que con su juvenil espíritu nos hace sentir
familia con todos sus miembros. Todo un signo en tiempos actuales de tanta fragmentación
generacional. Además del aporte que hacen de encargarse de los niños, como se
dice en las comunidades guaranís, participar del crecimiento y disfrute de los
niños de otros como Tíos. Tuvimos la alegría de la presencia y testimonio de
Diego, que venía de participar de la Jornada Mundial de la Juventud en Polonia.
Su foto fue el caminar en los campos de concentración…
En estas fotos se
sumaron Victoria y Gonzalo, los cuales celebraban un año de casados y eligieron
celebrarlo con nosotros. Como es costumbre en nuestros encuentros, cada cual
llega a la hora que puede y se queda hasta cuándo puede, por lo tanto su
llegada después de la misa “no fue tarde”,
provocando un tiempo de oración y encuentro, que permitió la sobremesa con las
fotos del día, momento profundo donde hicimos muy presente el misterio de la
presencia de Dios cada vez que nos juntamos como lo decían explícitamente “los
nuevos colibríes”, el matrimonio y Fernando Alarcón.
* Entre otras vivencias de la eucaristía, la que nos acompaño junto a la
palabra bíblica, fue la del saber indígena. El relato de aquel abuelo que quería
dejarle como herencia lo mejor a su nieto.
“Sabes niño, que dentro nuestro existe un lobo y un ángel, que desde
nuestro nacimiento hasta nuestra muerte estarán conviviendo e impulsando nuestro
ser hasta el final de este modo de existir.
- ¿Se pelean? Pregunto el niño
- Si, respondió el abuelo
- ¿Y quien ganara en mi la pelea, El Ángel o el lobo? , pregunto el niño.
- El que tú alimentes. Afirmo el sabio abuelo. “
Este relato nos llevo a dar una mirada desde donde veníamos y como llegábamos
a la celebración. Nos ayudo a tomar conciencia que "nuestras diferentes opciones”
alimentan a uno u a otro que después tiene sus consecuencias. Siempre que nos
encontramos “hay que dejar algo”, en este día, en este momento, los presentes
dijimos “valió la pena hacer el esfuerzo, dejar otras cosas, nadar contra
corriente, para estar hoy aquí” “esto domestica a nuestro lobo y alimenta a
nuestro Ángel”. Quizás podamos decir lo mismo al realizar la lectura de este
compartir. Este es nuestro deseo.
Nacho
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