Como Iglesia Cristiana debemos ser conciente del momento histórico y no estar mirando al cielo, el mundo nos impone: tener, consumir, ganarle al otro…
Como Iglesia tenemos la tentación de dejar el evangelio para "atraer más gente", para ganar como institución más adeptos.
La palabra de Jesús es clara: "Dios esta en medio de nosotros de la misma manera que se encarno, vivió y lo mataron en Jesucristo: pobre, perseguido, crucificado".
El Bautismo Cristiano es ponernos en ese camino que es seguir por el camino angosto de la vida comunitaria orante, incluyente, servicial, buscadora de la verdad y la justicia, con infinita misericordia; al servicio especial de los más empobrecidos y excluidos. El cristiano no camina hacia el éxito, el cristiano sigue a Cristo el crucificado y resucitado. La fe no se manifiesta en tener, ni en ganar, sino en compartir, en compartirme por amor. ¡Que locura!
La oración, la formación, la vida comunitaria cristiana nos ayuda a descubrir a un Dios Madre y Padre que si buscamos su voluntad llegamos a la plenitud Humana que es ser libre para una entrega gratuita de lo que soy en bien de los demás hermanos.
Hace mucho tiempo alguien dijo "donde este tu corazón esta tu tesoro". ¿Donde esta el nuestro?... la verdad del amor a mi rosa es el tiempo que le dedico, no las macetas que le compro o el jardinero que le pongo… la verdad de mi amor a las rosas es por el lugar que ocupan en mis proyectos familiares, antes o después de las cosas materiales…
Gracias a las madres por el tiempo que nos dedicaron y por recibirnos en esta vida a pesar de que no tuvieran la deseada maceta, el mejor compañero, o aunque llegamos fuera de tiempo. Un saludo especial a las Madres solteras, a las Madres que adoptan, y a las Mujeres que son Madres Sociales dando su tiempo su corazón a los más "pequeños" del Pueblo por puro Amor, de Ellas es el reino de los cielos.
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