Por el Lago Merín este fin de semana se entablo un dialogo a partir de un encuentro de jóvenes para unos “divertido” para otros “ruidoso”. Para unos hay que crear espacios de “movida” juvenil para dar vida al bañario, para otros hay que mantener lo natural del Lago como lugar diferente a la Pedrera de Rocha, mantenerlo como lugar de tranquilidad.
Comparto que me toco la gracia de ser chofer de los jóvenes de Río Branco que venían de la Jornada Nacional de la Juventud este fin de semana en Maldonado. Algo en ellos había cambiado después del encuentro con otros 4.000 jóvenes de todo el país.
Una de ellas decía que se sentía mas agradecida a la vida al escuchar realidades muy duras de otros jóvenes y que siguen adelante. Ella se sentía agradecida por tener una familia, comida todo los días, posibilidad de estudiar, escuchar música, tener amigos… cuando hay muchos de su edad que son trabajadores para esta sociedad consumista. Que consume servicios, bienes materiales, espectáculos, y directamente carne humana…
Contaban experiencias de jóvenes que desde muy pequeños tienen que salir a ganarse el pan trabajando en changas, niñas que se comienzan a prostituir en pasarelas de modelaje para vender productos o despertar placeres a quienes pagan primero para mirarlas y después para…
Jóvenes que son convocados para consumir música extranjera, ropa que no viste, alcohol, noche y sexualidad.
Jóvenes que son convocados para que se consuman unos a otros dando grandes ganancias económicas y de placeres a quienes organizan “la fiesta”…
En Maldonado acampados en cientos y cientos de carpas estos jóvenes fueron convocados para encontrarse con Cristo. El que anuncio la presencia de Dios deseando el buen vivir para todos. Por eso tuvieron espacios y tiempo con buena música, incluso de Rock pero con valores en sus letras. Tuvieron espacios de juegos, de encuentros con jóvenes de diferentes realidades. Estaban los de Marconi, Casabo, Aparicio Saravia de Montevideo por nombrar algunos lugares que aparecen en nuestros informativos nacionales con noticias trágicas y que marcan estas zonas como “rojas”.
El encuentro con Cristo era encontrarse con la historia del otro especialmente en sus cruces, dolores, angustias, carencias, y descubrir que una simple escucha, “un te comprendo”, un “tu puedes”… puede ser muy importante para todo joven… para toda persona humana…
Un cristo que le gusta ver a los jóvenes bailar y cantar con alegría.
Un cristo que le gusta que nos encontremos para reflexionar sobre la realidad, y que quiere hacernos ver la realidad tal cual es: los jóvenes no son una amenaza, los jóvenes están siendo utilizados por “personajes enriquecidos materialmente” con la carne de los jóvenes…
Un cristo que cree que podemos cambiar y quiere darnos una mano. Por eso también se crearon espacios de meditación al anochecer a la luz de la luna llena y se propuso madrugar para ir a ver el amanecer al mar…
Los jóvenes son un tesoro muy deseado que unos lo “utilizan” con fines de lucro afectivo comercial o económico y otros disfrutan de crear espacios donde ellos puedan vivir su etapa con integridad, con diversión sana y reflexión de la realidad que están viviendo, despertando sueños… Los que sirven a los jóvenes y desean lo mejor se gastan por ellos y gastan en ellos, los otros reiteramos “utilizan a los jóvenes para satisfacer sus necesidades”… Sin olvidar a los que son indiferentes o temeros de los joven, estos viven con nostalgia en otras épocas, a los cuales invitamos a tener una nueva primavera en el corazón, de que sirve sobrevivir 100 años entre reja amargados y miedosos… Cristo también nos anuncia el final “pobre de ustedes que se enriquecieron o satifacieron con carne humana y Felices ustedes que se gastaron y fueron perseguidos, calumniados, golpeados buscando el bien de los demás…” Para uno … para otros la vida eterna y desde ya la paz en el corazón…
Entre ellos estaban Erik con los de Casabo, Jorge Ayala con los de Aparicio Saravia, la Cheche, Male, Michin con los de Río Branco, Carmen desde Buenos Aires...
Gracias en nombre de lo jóvenes a aquellos que
van madurando y se van poniendo al servicio de los demás, que no viven para si mismo... que gastan su tiempo, saberes, afectos, bienes en que otros crezcan... gracias
Nacho
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