Enero de 2015- IV Encuentro Campamento Teológico Laguna
Merin.
-¿Cómo surge este Encuentro?
- Nace desde la experiencia del P. Nacho Aguirre (el párroco de Río Branco,
quien se encarga de aquí de la capilla del balneario de la Laguna Merìn). Él
cuando se fue de misionero en el año 2003 a Bolivia, también fue invitando a
algunos laicos misioneros de aquí de Uruguay que fueron a hacer experiencia
y que lo acompañaron durante mucho tiempo...
Nacho participa de unos encuentros
teológicos, SEMINARIOS DE FORMACIÓN TEOLÓGICA, que se llevan a cabo en Argentina, iniciados con el P. Orlando
Yorio (que estuvo viviendo también en Uruguay hace unos años, allí por Solimar ) participa de esos encuentros y encuentra que tienen una riqueza enorme
porque hacen partícipes a los laicos que no tienen la posibilidad de estudiar
académicamente teología.
Es la posibilidad de meterse en ese mundo pero en una teología vivencial, o
sea encontrar a Dios desde la vida cotidiana: desde la lucha por la justicia,
desde un montón de motivos que se van dando.
Entonces Nacho, junto a Raquel de Colonia y Roberto Flores de Montevideo, tiene la idea de
hacer algún tipo de retiro aquí en la Laguna Merìn con aquellos misioneros que
lo habían acompañado en su tiempo en Bolivia. Entonces en el año 2012 se da el
primer Encuentro con 5 personas junto a algunos turistas y residentes que en total llegaban a 10 o 15 por noche. A partir de allí año a año, esto fue
creciendo al punto que hoy, en este Encuentro de 2015, el IV han pasado cerca de 80, 90
personas de muchos lugares del país. Hay gente que por atraso de vuelo está
llegando mañana de Bolivia. Hay gente de Argentina, de Brasil (Yaguaron), de Río
Branco, de Melo, de Salto, de Montevideo, de Lazcano, de Florida, Colonia,
Soriano, Canelones, Mercedes, Artigas ....
Tenemos sacerdotes, tenemos algunos ex sacerdotes, algunas ex
religiosas. Tenemos familias,
familias con hijos que comparten también su vivencia de Dios.Tenemos laicos que están caminando en esta nueva Iglesia también impulsada
por el papa Francisco, que de alguna manera nosotros decimos que tenemos viento a favor.
Un Papa Argentino, un Papa que conoce la realidad de Latinoamericana, sabiendo
que a veces somos ese pulmón de la Iglesia católica que late en el mundo.
Diego :-¿ Y qué experiencia recoge un laico al meterse en ese mundo
teológico?
-Bien. En mi caso particular, yo fui seminarista y en mi época de
seminarista pude estudiar un poco de Teología pero a nivel académico, lo que
aquí vivimos que también se enriquece con lo que cada uno sabe o se ha dedicado
en su vida porque tenemos: maestr@s, profesores, amas de casa, panaderos
,cantantes, compositores, peluqueros, profesionales, jubilados...
Lo que hace meternos en el mundo de la teología es básicamente: Compartir
la Palabra de Dios y hacerla reflexión entre todos. Por ejemplo: en el día de
ayer el evangelio nos invitaba a mirar a Jesús cuando llama a sus doce
apóstoles, que los va llamando uno por uno y les va cambiando el nombre.
Entonces ese evangelio se lee en comunidad y entre todos tratamos de descubrir
lo que Jesús nos dice a nosotros en nuestra vida cotidiana de cada día pero
también como comunidad...Y allí es que se arma una reflexión teológica pero que
parte de la vida. No es una teología académica que parte de los libros sino que
parte de la vida misma de cada uno donde el aporte de un niño de 10 años como
tiene Martín ,que decía que se ponía feliz porque Jesús lo llamaba, hasta la
reflexión de una mujer de 65 años que después de hacer años religiosa y haber
dejado que sentía que Dios le pedía más...más entrega de seguir lo fielmente y
entonces así se arma una reflexión teológica que va iluminando la vida de cada
uno y también nos va dando una Identidad.
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