jueves, 12 de septiembre de 2013

Tercer Día con mucho calor, experimentando el amor del perdón.


Como dice nuestro amigo Juan, cuando no hay reparto de choripán, y agregamos cuando no se pasa lista... y la gente concurre es "verdaderamente un milagro"... es un signo bien visible que hay muchas personas en BÚSQUEDA  de algo mas... 
Entre la tarde y la noche unos 80 vecinos y vecinas están participando de esta experiencia espiritual.
En el día de hoy nos sentimos como la  "selección celeste" que después de haber perdido algunos partidos y estar casi fuera de la clasificación... experimentado el encuentro con Cristo "ganamos el infinito amor" que nos regala una vida nueva...
 -Al mal no hay que esconderlo, hay que afrontarlo, podemos encontrar nuestro enemigo interior para que no nos quite la felicidad.

-La persona herida hiere a los demás.

-El agresor es mucho más que su culpa. 
Comienzo a perdonarle mirándolo desde su dignidad.

-Pedir perdón
 hace perder la armadura al sufrimiento.

--El perdón es una reacción ante un mal, es un acto de libertad.
 El perdón no tiene cálculos.

-Perdonar exige ver la verdad de la ofensa  y la justicia. 
 Es una oportunidad para crecer y madurar.
-Cuando perdonamos  de corazón estamos diciendo:” Tú no eres así”

-Perdonar deriva de perdonare, darse hasta el extremo.

- Las heridas cuando se perdonan y curan  se pueden convertir en perlas.

-Nos ayudan a personar: el amor, la comprensión, la generosidad-misericordia-humildad.
“si quiero que seas bueno te trataré como  si ya lo fueres.”

-“No soy el juez de mi hermano”

-El tiempo cura las heridas.
Purificar la memoria  sana.




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