VERANEANDO, EN DIALOGO CON EL MAESTRO
M - «Un entrenador es un educador, debe transmitir conocimientos, llevar al grupo a conquistar cosas, pero no sólo a nivel utilitario».
* En tiempos donde la mayoría de los estudiantes están de vacaciones, elegimos compartir las palabras del Maestro Óscar W. Tabárez buscando en su conocimiento algo que sea mas que útil, algo que sea para ser mejor persona en este colectivo social que llamamos: Uruguay, Patria Grande, América, Aldea mundial.
Otro mundo es posible, se necesita educadores que no nos digan que hay que hacer sino «que se puede» y eso parte de considerarnos «iguales» sin arrodillarnos ante nadie, ni considerar a nadie bajo nuestros pies.
M - «No hay que decirle a un jugador jamás lo que tiene que hacer, sino mostrarle cómo deben ser las cosas, tratando a todos por igual.».
* En un tiempo donde se premia a la que entra en la categoría de bella, donde se le da la bandera a quien se destaca sobre sus compañeros. Donde en la mayoría de las actividades se buscan «estrellas». Incluso los padres sueñan con tener un hijo que sea sobresaliente en algo.
Esta mentalidad ha sembrado muchas frustraciones en la sociedad: no tengo el cuerpo que otros desean, no soy reconocido como otros, no soy el mejor en nada... lo que me queda es consumir y consumir para llenar el vacío que hay dentro de mí.
En este mismo tiempo en un barrio (como cualquier otro) el Cerrito de la Victoria, con una profesión no de las mejores valoradas: maestro y en un puesto de entrenador de fútbol (que normalmente es el primero que vuela cuando los resultados no se dan y queda olvidado en los logros tapado por un goleador o incluso por un buen arquero), en este mismo tiempo y en una realidad semejante a la nuestra existe un hombre que se reconoce como «común».
Sin haber sobresalido ni como niño, ni como estudiante , siendo un maestro del montón y con una carrera deportiva semejante a la mayoría: con algunos logros que duraron muy poco y muchos empates y derrotas que causaron ser sustituido con el rótulo de inesperiente, poco ofensivo, sin clase, sin nivel para esta liga, ya un poco viejo...
M- « Quizás la diferencia entre los hombres no es por lo que les pasa, ya que a la mayoría nos pasan cosas buenas y tenemos carencias, quizás la diferencia es qué hacemos con lo que nos ocurre».
* Un maestro que se sintió alumno de la realidad. Atento a lo que decían los titulares de periódicos en el quiosco. A la escucha de los comentarios en ruedas de mate. A los cambios climáticos. Haciendo una continúa evaluación de su trabajo. Aprendiendo de los errores, reafirmando lo que va dando resultados. Es importante resaltar que estos logros llegan pasado los 60 años de camino...
M- « De lo viejo, de los viejos he intentado vivir y trasmitir que lo correcto es lo mejor para todos. Pero también no quise quedarme en que lo mejor ya pasó como el mundial del Maracaná. Creo que hay que vivir en el tiempo que vivimos y este es el que nos da la posibilidades mejores, porque la verdad es que es en el único que podemos vivir y ser alguien».
«En todos estos años de vida he visto que uno de los mejores dones es aprender a superar las frustraciones.
Muchos sobresalientes se quedaron en su primera derrota. Nosotros hemos logrado algo aprendiendo de muchas derrotas, incluso cuando muchos creían que ya no era posible. Eso pasó en las eliminatorias faltando 5 partidos y estábamos quedando eliminados. Algunos dijeron que fuimos sin partidos de preparación al mundial. En la copa América que hasta Argentina llegábamos. Y seguramente habrán de esas voces en el futuro...»
* El mundo quiere éxito y exitosos. En un tiempo donde se usa y se desecha las cosas pero también a las personas.
Este ciudadano «común» superando muchas frustraciones nos dice que ningún camino es lineal. Y que para llegar a la próxima montaña muchas veces hay que saber caminar por el valle presente.
Tampoco son la última tecnología, ni la última indumentaria o el centro de máximo rendimiento lo que hace la diferencia. Quizás la diferencia esté en la confianza en nosotros mismos y en los compañeros de equipos.
Aunque no seamos ni tengamos el mejor jugador del mundo.
Ser mejor es creer desde nuestras posibilidades y creer en los demás.
El pesimista no cruza la calle ni estimula a que otros la crucen.
M- «Un día de vuelta ciclista del Uruguay escuché a un entrenador francés que nos pintó: acá en Uruguay cuando alguien sobresale todos van contra él y se estimula para que lo superen. Nosotros intentamos ser uno para todos y todos para uno, gane quien gane. Gana el equipo, ganamos todos»
* Un entrenador de fútbol Uruguayo que está atento a aprender de un entrenador de ciclismo extranjero es un buen alumno. Y que bien que aprendió. Acá todavía mantenemos la cultura de querer ser mejor que los demás o seguir a un caudillo. Nos cuesta sentirnos parte de un grupo donde lo importante no es quien haga los goles, lo importante es jugar todos para todos. En este camino periodistas e hinchas no han aprendido la lección. Cuando faltó Forlán creían que todo se terminaba. Apareció Suárez con cuatro goles y cuando faltó ante Italia se dijo que era imposible y un empate sería victoria. El triunfo del equipo incluso de visitante nos reiteró la lección.
M- « De jardinero aprendí mucho para el fútbol y la vida. Hay que sembrar, cosechar, hay que podar y a veces hay que arrancar de raíz para salvar otras cosas».
* Algún año antes de este trabajo en la selección quedó sin ser elegido para dirigir y se dedicó al jardín.
El buen alumno en todo lugar aprende, no para salvar un examen ni para lograr algo, aprende por aprender.
M- « Un entrenador de basquetbol dijo:
Estar mentalizado es estar feliz con el lugar donde uno está.
Si alguien no se siente feliz de estar en un equipo, aunque su lugar sea el banco de suplente, es mejor podarlo.
La felicidad es contagiosa como todo lo demás. Si en un partido de fútbol influye la hinchada a favor cuanto más será sentir el equipo que te alienta.
Las rivalidades internas quitan energías y nos debían del objetivo».
* Si esto lo llevamos a nuestras familias, a los ámbitos de trabajo, a la política e incluso a nuestros días de descanso sin duda que nos invita a aprender, sembrar y podar si hay que podar. La disponibilidad para el juego fue fundamental, nos sorprendía como delanteros defendían y defensas hacían goles.
Totalmente lo contrario a la mentalidad «a mi no me mueve nadie, yo hago solamente esto, no me pidan más, si no fuera por mi... Todas expresiones de limitarse o superponerse ante otros y ante una realidad.
M- »Una vez, cuando trabajaba como maestro en una escuela, el director nos preguntó por qué fracasaban los programas.
Dijimos que era porque los niños no los entendían. El director nos dijo que era porque nosotros no sabíamos explicarlos, de modo que trabajamos en eso hasta que funcionaron».
* El culpar a otros, el excusarse que nos faltan medios, decir que soy muy joven o muy viejo, es elegir quedar sentado fuera del camino.
Todos según nuestras posibilidades en cada tiempo histórico tenemos un granito de arena para aportar. Hay que buscar la vuelta para encontrar nuestro lugar y el lugar del otro.
M -»Es un poco mágico todo lo que nos está sucediendo», «Esto nos asombra. Es muy difícil lograr esto». «Lo que se disfruta es el camino, cómo se hacen las cosas, no sólo el resultado final».
* La rotación en las estaciones, con tiempos de frutos y otros sin ellos nos indica que no tenemos que poner nuestro corazón en los resultados. Mañana será diferente al hoy.
Pero la lección está dada
«El camino es la recompensa».
¿Qué haríamos?
El Colibrí
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